A lo largo del litoral costero de Barcelona, y especialmete en la zona de playa de La Barceloneta, encontrarás multitud de esculturas y monumentos.
La mayoría de ellos fueron colocados en lugares públicos con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992, y muchos llevan la firma de un escultor significativo de distintas tendencias de arte contemporáneo.
Esta sección está destinada a que conozcas estas esculturas y sepas qué representan cuando te encuentres con ellas en tu visita a las playa de Barceloneta.
Una habitació on sempre plou
Una habitación donde siempre llueve es una original escultura situada en la Plaça del Mar de la playa de La Barceloneta.
Es una obra de Juan Muñoz y data de 1992, año en el que se celebraron los Juegos Olímpicos de la ciudad.
Es una galería de rejas en la que habitan cinco figuras de bronce que surge entre tres grandes árboles que le dan sombra.
Debía estar continuamente lloviendo en su interior, de ahí el título de la instalación. La muerte prematura de su creador dejó el conjunto inacabado.
Homenatge a la Natació
También el la Plaça del Mar, en la playa de Sant Sebastià, verás otra obra de arte: Homenaje a la Natación.
Es un conjunto de figuras abstractas que parecen danzar frenéticamente, pero en realidad simbolizan algo muy distinto.
Sus personajes de bronce representan las distintas modalidades de natación: saltos, natación sincronizada, waterpolo y velocidad.
Destaca por su juego entre lleno y el espacio vacío y por los reflejos del bronce bajo la luz del sol. Su autor es Alfredo Lanz y data del año 2004.
L’Estel ferit
La estrella herida es obra de la escultura contemporánea Rebecca Horn.
Se colocó en 1992 con motivo de los Juegos Olímpicos de la ciudad.
La encontrarás en la playa, accediendo desde la calle de Meer, toncado al Passeig Marítim de La Barceloneta.
Es una escultura vertical realizada en hierro y vidrio, y representa una estrella malherida caída desde el cielo.
La forman cuatro grandes cubos apilados uno encima de otro, que brillan debido a una luz colocada en su interior.
Crescendo appare
Está situada en la calle del Almirall Cervera, al Moll de La Barceloneta. Su creador, Mario Merz la proyectó en 1992.
Es otra de las obras que se colocaron el calles públicas de la ciudad con motivo de la celebración de los Juegos Olímpicos de 1992.
Debes mirar al suelo para poder verla, ya que la instalación está situada bajo el mismo.
Son unos plafones de neones rojos, acero inoxidable y vidrio que destacan sobre el pavimento, ocupando 160 metros de longitud.
Evocació Marinera
Al final del Passeig de Borbó, tocando a la playa de La Barceloneta, verás esta escultura abstracta de Josep Maria Subirachs.
Es una escultura realizada en bronce que lleva por título Evocación marinera. Se instaló en el año 1960, y fue una de las primeras esculturas abstractas que fueron colocadas en lugares públicos de la ciudad.
En su momento generó cierta polémica por su informalismo y su extraña forma, de interpretación personal. Es ciertamente una evocación, una inspiración particular de lo que el mar representa para su creador.